Historia de la Iglesia del Nazareno en El Salvador

HISTORIA DE LA IGLESIA DEL NAZARENO EN EL SALVADOR

Por Rvdo. Luis Flores

Nuestra historia principia en la década de los 1960s, exactamente en el año 1964. El país se encontraba envuelto en una serie de protestas sociales entre el gobierno y el gremio de maestros; tales como huelgas, manifestaciones, violencia, irrespeto a los derechos humanos, lo cual imperaba en ese momento. Dicho ambiente en los siguientes diez años llevaría al pueblo salvadoreño a una guerra que traería como resultado un aproximado de 80.000 mil personas muertas, golpes de estado, 20.000 mil desaparecidos y una guerra que duro doce años.

Siete años antes de los acontecimientos anteriormente descritos, Dios despierta en el corazón de hermanos guatemaltecos para viajar a El Salvador. Es así que en 1957 se realizó el primer intento para abrir la misión nazarena en nuestro país, por iniciativa de los hermanos Roberto Ingram (estadounidense), Federico Guillermo (guatemalteco) y ocho hermanos más del concilio misionero de Guatemala. Su deseo era dejar un grupo permanente predicando el mensaje de santidad. En Agosto de ese año se añadió al equipo Ismael Bolaños; todo el equipo inicio el trabajo en la ciudad de San Martín, alcanzando a 16 personas para Cristo. Sin embargo, la obra se vio obstaculizada por el párroco del lugar, acusando al hermano Bolaños de enseñar el comunismo en el país y junto con las autoridades y residentes del lugar expulsaron a los misioneros de la zona, terminando así el primer intento de abrir una misión en nuestro país.

En medio del caos de los años 1960s se realiza un segundo intento promovido por el superintendente Federico Guillermo, enviando a las misioneras guatemaltecas Ernestina López y Amparo Ruano, quienes llegaron a El Salvador el 1º de Mayo de 1964. Ubicándose en un barrio popular llamado Concepción, fundaron la primera Escuela dominical con 40 niños, siendo el primer adulto convertido el hermano Rafael Flores. En el mes de Agosto del mismo año llegaron al país los misioneros Lorenzo y Eunice Bryan para apoyar la obra misionera.

El tiempo transcurrió muy rápido y dos años después, el sábado 25 de Febrero de 1967, se declaró oficialmente organizada la Primera Iglesia del Nazareno en El Salvador, con 29 miembros en plena comunión, nombrando como primer pastor al hermano Juan Xitumul López (guatemalteco). Al día siguiente en un culto muy hermoso se
organizaba la segunda misión conocida como Iglesia del Nazareno Jardín, con 18
miembros, siendo sus pastores los esposos Bryan.

La expansión nazarena continuó y es así que en 1970 se organizaron las siguientes iglesias: la de Santa Ana, la de San Miguel y la de Vista Hermosa. El trabajo misionero lo realizaron los esposos Norma y Stanley Storey, Danilo Solís, y Juan Lucas. Todo el esfuerzo mencionado propició el nacimiento del primer distrito en El Salvador, siendo le primer superintendente el Reverendo Allen D. Wilson.

En las dos décadas siguientes se produjo un crecimiento de mucha bendición. Es así que de 1970 a 1979 se organizaron 5 iglesias más en el área central y occidental del país. En los años 1980s, 16 congregaciones más, y para los años 1990s, 9 iglesias más.

En 1994, como estrategia del la región el país se dividió en tres destritos, quedando de la siguiente manera: Distrito Centro: San Salvador, San Vicente, Cuscatlán, Chalatenango, Cabañas y La Paz; Distrito Occidental, formado por Santa Ana, Sonsonate, Ahuachapän y La Libertad; y Distrito Oriente, constituido por La Unión, San Miguel, Morazán y Usulután. Dicha división trajo buenos resultados.

La anterior visión general del proceso histórico de la iglesia nos da la base para realizar una descripción del crecimiento cualitativo de la iglesia, la cual se divide en tres rubros:


Membresía: A la fecha es de 5,500 miembros en los tres distritos.
Iglesias: Según datos de asambleas del 2003, se cuenta con 38 iglesias organizadas y 5 misiones en proyecto.
Distritos: Como se hizo mención en la parte histórica, a la fecha los distritos se han desarrollado así: Distrito Occidente a nivel de fase I, cuenta con ocho locales propios para las iglesias y su respectiva casa distrital; Distrito Centro, fase III, en un noventa por ciento son locales propios, además de contar con 2 colegios y su local distrital; finalmente Distrito Oriente, con dos locales propios, no cuentan con local distrital, pero tienen una gran visión para el futuro.

En cuanto al área de evangelismo misional, El Salvador por medio de sus distritos e iglesias locales ha logrado incursionar quizá no en grupos étnicos, pero si en lugares en donde el catolicismo romano es imperante; Dios ha sido poderoso y su Palabra a penetrado en los corazones de muchas personas, logrando así la organización de varias iglesias y en otras zonas se continua dando apertura a otras misiones. Para el desarrollo y ejecución de la misión se han utilizado las siguientes estrategias:

-En la década de los 70, 80 y 90 el Plan Impacto fue la herramienta que el Señor utilizó para el crecimiento cualitativo y cuantitativo de las iglesias.

-Después del terremoto del 86, apoyados por World Relief, la iglesia del Nazareno junto a otras denominaciones, fue parte de la construcción de viviendas en comunidades pobres; logrando subsanar necesidades materiales y espirituales en los habitantes; de tal manera que muchos fueron alcanzados para Cristo e inclusive iglesias fueron construidas.

-La construcción de colegios cristianos fue otra forma de acercamiento y presentación del mensaje salvador a muchas personas y jóvenes.

-En evangelismo agresivo y de alcance de multitudes se tuvieron campañas evangelísticas en gimnasios, parques, canchas y colonias; aunadas a la película Jesús. Por ambos métodos cientos de personas aceptaron a Jesús.

-Los ministerios de compasión brindaron un apoyo tremendo a la misión salvadoreña, capacitando asesorando y brindando materiales, para la implementación de campañas de salud, odontológicas, salud mental, etc.

Con referencia a la educación teológica, ésta tiene su base y génesis el 04 de febrero de 1980, fecha en la que el SENDAS patrocinó el programa de CENETA con el fin de preparar a pastores y líderes locales. La visión continúo de tal manera que algunos pastores viajaron a los seminarios de Guatemala y Costa Rica, en busca de un aprendizaje más profesional en la teología. En 1994 el Seminario Teológico Nazareno de Guatemala descentraliza los programas de bachillerato y profesorado en teología; dichos programas dieron sus frutos, de tal manera que en el 2002, SENDAS de Costa Rica, envía al país su programa de Maestría en Ciencias de la Religión. En la actualidad tenemos la bendición de contar con los programas de ETED, bachillerato, profesorado, licenciatura y la futura construcción de nuestro primer local de estudios, auspiciado por hermanos de la ciudad de Washington DC(USA), el cual servirá para la preparación de todo el liderazgo de los tres distritos y para servir con mayor efectividad a la iglesia del Señor.

Tomando como base que uno de nuestros pilares, de que Somos un Pueblo Misional, sobre todo reconociendo que las Escrituras nos presentan a un Dios Redentor y Misional, es que se han hechos grandes intentos para desarrollar una Misso Dei integral, tal y como la requiere Jesucristo. Es así que toda nuestra misión está encausada a encarnar con los diversos grupos, clases sociales del país y necesidades del mismo, con el propósito de que las personas a través de la iglesia puedan visualizar y reconocer el gran amor que Dios tiene para toda la humanidad. Por lo cual, se han cambiado muchos paradigmas que al inició eran un obstáculo para la obra. Los creyentes e iglesias han sido y están siendo enseñadas y guiadas a no realizar una misión centrípeta, sino que centrifuga. De tal manera que en algunas congregaciones se han formado grupos misioneros enfocados en el nuevo paradigma misional bíblico, lo cual está brindando muchos frutos en lo cualitativo y cuantitativo. Los distritos e iglesias hoy por hoy desarrollan una misión profética, sacerdotal, con el único fin de ministrar y atender las necedades bio, psico, sociales y espirituales de los salvadoreños.